10 abr 2012

35 - CIENCIA

CIENCIA



Ciencia. Esa rama del conocimiento pura y objetiva. ¿Qué hago hablando de ella cuando huí de sus designios? ¿Qué hago dedicándole una entrada si ahora mi corazón se entrega a la belleza de los idiomas y la comunicación humana?

Esta última pregunta se basa en una presuposición falsa. Una falacia. El año pasado, al enterarse de mi marcha del grado en Matemáticas, Pilar (que me daba Álgebra Lineal) me dijo: "Una persona de ciencias es siempre de ciencias, siga el camino que siga." Por aquel entonces le di la razón sin apenas pensar en ello. Incluso no estando muy convencido.

Cuánta verdad acumulada en esas palabras que me dedicó con gran cariño, como a todos sus alumnos. Llevo ya medio año como alumno de Letras y aún así sigo conservando costumbres y vicios típicos de los científicos.

La obsesión por la objetividad, la búsqueda de la certeza, el pensamiento acerca de los orígenes de los entes que nos rodean. Soy ciencia: eso es algo inevitable. Esto no quiere decir que me arrepienta de la decisión que tomé el año pasado sobre esta época.

En absoluto. Soy feliz de mi decisión. No cambiaría nada de lo que he hecho para llegar hasta aquí, ni siquiera el sufrimiento por el que alguna vez pasé. Cada una es una pieza importante del puzle en que se ha convertido mi corazón.

Ay, el corazón... Eso que tengo tan dentro de mí, aún cerrado. Tan confuso actualmente. Tras tanto tiempo aislado del mundo exterior no sabe cómo reaccionar a los estímulos externos y me ha llevado a poner mi mundo patas arriba. No me quejo, qué va. No es una sensación desagradable. Pero quiero saber si lo que me trata de decir (en una lengua que ha evolucionado en algo incomprensible para mí) es el mensaje que espero o no.

Afirmativo o negativo, hice una promesa. Seguir siempre con mi criterio y no defraudar. Todo se puede. Solo busca la manera que te resulta más favorable a tu situación. No consiste en engañar a las emociones. Menos cuando dejaste claro que pese a cualquier cosa estarías ahí.

Se abra o se cierre yo estaré delante envuelto en un cálido abrazo. Y en versos de tranquilidad y paz. Porque, pese a todo, algo ahora es innegable. Y es eso lo que tengo que agradecer y por lo que jamás me separaré de este mundo que me he creado.

¿Promesas de futuro? Este chico, antiguamente de ciencias, cree en la objetividad de ese sueño. Es factible, es posible, es fácil si se pone empeño. Luchemos todos juntos por crear esas nuevas piezas que seguiremos incorporando a nuestros rompecabezas.

Os vigilo desde mi trono de metáforas

Eric

2 comentarios:

  1. Es verdad, se nota un montón por tu manera de escribir que eres de ciencias, no me preguntes en qué me baso para ello, pero se nota.
    PD: las ciencias son el demonio, no lo olvides.

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  2. Darme una vuelta por aquí, encontrar esto y tener ganas de violarte.

    Recuerda las sabias palabras de Estela, las ciencias son el demonio! D: #EsclavaIsAlwaysRight
    Ven al lado pornoso... el lado de letras...

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